Roberto Cánepa Leiva, quien falleció este miércoles 3 de diciembre a los 89 años en Junín, fue el fundador del histórico Taller Literario de la ciudad y el gestor que impulsó las visitas de Jorge Luis Borges, dejando un legado que definió la vida cultural local a lo largo de casi medio siglo.
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Un referente que consolidó el mayor proyecto literario de la región
Procurador, docente y escritor, Cánepa Leiva fue una figura central para la cultura juninense desde 1978, cuando creó el Taller Literario Junín junto a colaboradores como Juan Biondini. Con el tiempo, el espacio se convirtió en un ámbito formativo clave, primero con cursos de narrativa y poesía y luego, tras el reconocimiento oficial del Ministerio de Educación, con un enfoque en la lectura analítica.
El Taller editó 14 libros, publicó la revista Oxymoron y logró reconocimiento de entidades literarias en Capital Federal. Durante más de 20 años, llevó a Junín a los principales escritores del país sin apoyo económico oficial ni privado, consolidándose como un motor cultural único en la región. Su impulso docente lo llevó además a fundar talleres en Bragado y Villa Cañas.
En mayo de 2025, recibió un homenaje en el Club Social por los 47 años del Taller, en un acto encabezado por el entonces presidente Arturo Crosetti (h). La actividad del espacio se mantuvo hasta marzo de este año, cuando finalizó su ciclo histórico.

El hombre detrás de las visitas de Borges y una vida dedicada al arte
Uno de los aportes más trascendentes de Cánepa Leiva fue su rol clave en las tres visitas de Jorge Luis Borges a Junín. Según reconstruye Junin Historia, Borges disertó en la ciudad en 1966, 1970 y 1975, con exposiciones sobre Lugones, la conquista del desierto y su propia obra. Aquellas conferencias se realizaron en el Club Social y el Colegio de Abogados y marcaron hitos en la vida cultural local.
Cánepa Leiva también mantuvo una estrecha amistad con Horacio J. de la Cámara, referente regional, quien lo invitó a integrar la revista literaria Asterisco. Hasta agosto de este año participó como columnista del programa Amanece que no es poco, por LT 20 Radio Junín.
Llegó a la ciudad en 1942, estudió en la Escuela Normal-Nacional y más tarde se formó en Derecho en La Plata. Fue miembro del Instituto de Cultura Hispánica, socio vitalicio del Club Social y un apasionado del tango: compuso tres tangos con letra y música y trabajó en producciones radiales y en el recordado Canal 2 de Junín.
Su fallecimiento marca el cierre de un capítulo fundamental para la cultura regional. Su obra —libros, teatro, música y difusión cultural— y, sobre todo, la creación del Taller Literario, constituyen un legado que seguirá activo en cada escritor y lector formado bajo su influencia.
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La comunidad de Junín lo despide con reconocimiento unánime: instituciones como el Club Social, el intendente Pablo Petrecca y su equipo de gobierno, medios locales y familiares expresaron su pesar. Sus restos fueron inhumados en el Cementerio Parque Rosedal.
Roberto Cánepa Leiva no solo fue testigo de la historia cultural de Junín: fue su gran arquitecto. Su huella, profunda y perdurable, seguirá acompañando a las futuras generaciones.
Con información de El Diario del Lunes, Junín Historia y Junín en el recuerdo.-






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