El bloque de concejales de Unión por la Patria en Junín presentó un pedido de informes al Gobierno nacional para que explique por qué se encuentran paralizadas las obras del tramo V del Plan Maestro del Río Salado.
Los ediles advirtieron que es una decisión que afecta a productores, poblaciones rurales y caminos en el noroeste bonaerense.
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Un plan clave que quedó congelado
El edil Gastón Bisio recordó que en abril, antes de las intensas lluvias, ya habían reclamado por la detención del dragado iniciado en 2003. La obra tuvo interrupciones entre 2015 y 2019, fue reactivada por Alberto Fernández y volvió a frenarse en 2024, tras la asunción de Javier Milei.
Los concejales remarcaron que la obra depende de fondos nacionales y ejecución provincial. Ese financiamiento proviene del Fondo Hídrico, recaudado con un impuesto que se cobra cada vez que los usuarios cargan combustible líquido o GNC. “Seguimos pagando ese impuesto a diario, aunque la obra está congelada”, cuestionó Bisio.
Críticas al oficialismo local y falta de respuestas
Bisio también apuntó contra el oficialismo juninense por no acompañar el reclamo en su momento: “En abril hubiese sido bueno el acompañamiento, pero estaban especulando sobre el color con el que se iban a pintar para las elecciones y no quisieron enfrentar al Gobierno nacional”.
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Hasta el momento, la Nación no respondió a los pedidos de informes y la obra sigue detenida, con el consiguiente impacto en inundaciones, hectáreas productivas anegadas, caminos rurales cortados y pueblos aislados.






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