El intendente de Junín, Pablo Petrecca, analiza presentarse como candidato a senador por la Cuarta Sección Electoral en las elecciones del próximo 7 de septiembre, en medio de las crecientes tensiones entre sectores del PRO bonaerense y La Libertad Avanza.
La posibilidad fue confirmada por una fuente de alto nivel del PRO juninense, quien afirmó a Edición Noroeste que “es una de las alternativas” que baraja el jefe comunal, ya sea en alianza con el espacio libertario o con un frente propio, incluso bajo una reedición local de Juntos por el Cambio.
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“Pablo es un referente seccional, es joven pero tiene mucha experiencia acumulada, y hay muchos dirigentes que le están pidiendo que encabece la boleta”, señaló a Edición Noroeste un dirigente del partido fundado por Mauricio Macri.
Aunque desde la conducción provincial del PRO aseguran que “ya están todos los intendentes armando con La Libertad Avanza”, en el territorio se multiplican las señales de disidencia. En distritos clave como Junín y Nueve de Julio, Petrecca y la intendenta María José Gentile ya evalúan alternativas electorales que se desmarquen del oficialismo nacional.
El caso más emblemático de esta tendencia se vio en San Nicolás, donde los hermanos Passaglia lanzaron su propio espacio, Hechos, con un perfil anti-kirchnerista, pero despegado del mileísmo. Esa jugada reconfiguró el mapa del noroeste bonaerense y se convirtió en un modelo observado de cerca por otros intendentes que buscan preservar sus estructuras locales.
Disconformidad creciente y temor por la representación legislativa
Mientras las negociaciones entre el PRO y LLA siguen abiertas, crece el malestar en el macrismo territorial. “Obviamente que si no se respeta la territorialidad, cada espacio hará lo que tenga que hacer”, advierten desde el entorno de Petrecca.
El temor es claro: perder control en los concejos deliberantes. En Junín, el oficialismo local (Juntos) tiene 10 de las 20 bancas, pero en estas elecciones se renovarán 6, lo que podría alterar la mayoría. De esas diez bancas, cinco corresponden al PRO, tres a la UCR y dos a la Coalición Cívica.
En ese contexto, se discute una nueva configuración electoral: un frente seccional anti-kirchnerista, con foco en la gestión y el arraigo territorial, pero sin subordinación al sello libertario. El “nuevo Juntos por el Cambio”, como ya lo llaman algunos armadores, incluiría a sectores del PRO, radicales díscolos, dirigentes vecinalistas y referentes de la CC.
La hoja de ruta libertaria y el quiebre con el PRO
El escenario se tensó tras un mensaje del armador bonaerense de LLA, Sebastián Pareja, quien advirtió que la única posibilidad de ir con el PRO es sin vestigios del frente electoral y borrando la marca PRO de las boletas. El anuncio generó fuerte rechazo en el macrismo, que recibió una luz verde informal de Mauricio Macri para cerrar listas “con dignidad” en cada sección electoral, incluso sin el paraguas de los libertarios.
Mientras tanto, la interna libertaria también atraviesa turbulencias. El diputado José Luis Espert quedó al margen de las negociaciones con el PRO y podría ser degradado a una boleta seccional, tras ser vetado por Karina Milei y Santiago Caputo, e incluso repudiado por sectores como la Universidad Católica Argentina tras sus últimos exabruptos públicos.
El centro de la estrategia libertaria pasa por blindar la gobernabilidad en el Congreso más que competir con fuerza en la legislatura bonaerense. Pero la interna con el PRO complica ese objetivo.
Un tablero en plena reconfiguración
A la par del deterioro del vínculo con el PRO, La Libertad Avanza también observa con atención la situación del peronismo bonaerense tras la inhabilitación judicial de Cristina Kirchner. La Corte Suprema confirmó la sentencia contra la expresidenta, lo que la deja fuera de competencia en la Tercera Sección Electoral. La ausencia de Cristina en la boleta genera incertidumbre en el PJ y abre un nuevo interrogante sobre quién encabezará en el principal bastión del kirchnerismo.
En paralelo, Axel Kicillof monitorea los movimientos tanto del PRO como de LLA, con la vista puesta en una eventual reunificación de la elección en territorio bonaerense. Mientras tanto, los intendentes opositores resisten los avances del armado libertario y no están dispuestos a diluir su representación local en listas que no controlan.
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