La diputada nacional por el radicalismo Danya Tavela cuestionó al gobierno de Javier Milei por la parálisis de más de 2300 obras en todo el país y advirtió que “cada día que pasa con las obras detenidas, el Estado pierde dinero y la infraestructura se sigue deteriorando”.
La legisladora radicada en Junín advirtió que obras clave como autopistas, rutas, hospitales, escuelas, universidades, plantas potabilizadoras, redes de agua, cloacas, gas, viviendas e infraestructura urbana han quedado en el aire. “Estas obras, muchas esperadas por décadas, hoy están en un limbo”, señaló la exvicerrectora de la Unnoba.
La diputada expresó su preocupación en el Congreso Nacional. “Las obras públicas paralizadas no solo generan problemas a miles de vecinos, sino que también representan pérdidas millonarias para el Estado”, subrayó.
En su intervención, Tavela no se guardó críticas hacia la gestión actual. «El Gobierno no parece interesado en las vidas que están en riesgo ni en la competitividad económica del país. Lo que no quieren ver es que esto también es una cuestión de eficiencia del estado», afirmó. “Cada día que pasa con las obras detenidas, el Estado pierde dinero y la infraestructura se sigue deteriorando”, agregó.
Obras clave paralizadas en la región
Entre los ejemplos más alarmantes, Tavela destacó la situación de la Ruta 7, donde el tramo Chacabuco-Junín sigue sin terminarse. “Es el único tramo que falta y está en total abandono. Se está deteriorando todo lo que los argentinos han invertido”, lamentó. “No es solo un problema de este gobierno; la inversión es de todos los argentinos, y el Estado tiene la obligación de asegurar su continuidad”, enfatizó.
También se refirió al paso bajo nivel de calle Rivadavia en Junín, una obra que lleva más de dos años sin avances. «Hace dos años que esa obra está detenida y nadie da una respuesta seria. Lo hemos planteado al jefe de Gabinete, lo hemos expuesto en la comisión de Presupuesto, pero solo recibimos excusas y respuestas que no están a la altura», criticó.
Prioridades claras
Tavela insistió en la necesidad de abordar el tema con responsabilidad. «No podemos seguir mirando hacia otro lado mientras las obras se desmoronan. Hay tres aspectos fundamentales que debemos priorizar: las vidas de las personas, la competitividad económica y los recursos ya invertidos que el Estado está perdiendo con cada día de abandono», concluyó.
Edición Noroeste 
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