Claudia Cabodevila, hermana e hija de las víctimas de un robo ocurrido en una quinta en las afueras de General Pinto, expresó su frustración ante la falta de respuestas por parte de las autoridades, a casi una semana del suceso.
El robo, que habría ocurrido el jueves pasado, afectó una propiedad ubicada en el camino viejo a Germania, a pocos metros de la ruta que conecta con la ciudad vecina.
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Según la familia, los ladrones actuaron durante varias horas, sustrayendo una gran cantidad de objetos, entre los que se encuentran herramientas de mano, baterías, rollos de alambre y bidones de gasoil.
Recuperaron solo unos pocos objetos
La Policía realizó allanamientos en las horas siguientes al robo, logrando recuperar algunos elementos metálicos que fueron identificados por el hermano de Claudia como de su propiedad. No obstante, la indignación crece debido a que, según la familia, en uno de los domicilios allanados se encontraron parte de los objetos robados, pero no se han realizado detenciones ni se han recuperado los bienes más valiosos.
«De lo grande, rollos de alambre, bidones con gasoil, herramientas de mano, baterías, no encontraron nada», manifestó Claudia con evidente malestar, cuestionando cómo no se ha podido avanzar en la investigación a pesar de los hallazgos iniciales.
Sospechas de un robo planeado
La familia sospecha que los delincuentes conocían bien los movimientos de la propiedad, ya que su padre y su hermano, quienes solían pasar gran parte del día en la quinta, recientemente habían dejado de hacerlo debido a problemas de salud.
«Quienes ingresaron estuvieron varias horas y conocían el movimiento», comentó Claudia, señalando que el robo requirió tiempo y un vehículo para trasladar los objetos sustraídos.
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«La justicia no nos da respuestas»
A pesar de las evidencias y del valor millonario de lo robado, la familia aún no ha recibido respuestas satisfactorias por parte de la justicia. «Estimamos que nos robaron entre $6.000.000 y $8.000.000″, concluyó Claudia, reiterando su indignación ante la falta de avances en el caso.
El caso sigue abierto, mientras los damnificados exigen respuestas rápidas y una investigación más profunda.
Edición Noroeste 
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