En medio de una economía inmersa en una profunda recesión, la paralización de la obra del puente bajo nivel de Rivadavia, en la intersección con las vías del tren, en Junín, provocó una serie de problemas económicos y sociales para la comunidad. La obra, que comenzó con grandes expectativas, quedó detenida en diciembre pasado con menos de un 20 por ciento de avance, sumiendo a la zona en un estado de incertidumbre y dificultades.
El corte del tránsito en esta importante arteria juninense ha causado un fuerte perjuicio económico en los comercios aledaños, muchos de los cuales se han visto obligados a cerrar sus puertas. Según informaron los comerciantes damnificados a Edición Noroeste, al menos una docena de negocios han tenido que cesar sus actividades debido a la falta de circulación y clientes en la zona. Esta situación ha generado preocupación entre los vecinos, quienes ven cómo sus fuentes de empleo y sustento se ven afectadas.
Ante esta crisis, los vecinos afectados han pedido reabrir el tránsito para intentar recuperar la normalidad en la zona. Sin embargo, desde el municipio aseguran que la reapertura del tránsito sería una medida costosa y compleja de llevar a cabo, lo que añade más incertidumbre sobre el futuro de la obra y la situación de los comerciantes y vecinos.

Un problema extra
La situación se agrava aún más con la información, dada a conocer, en exclusiva, por este medio, de que la Comisión Nacional de Regulación del Transporte (CNRT) dio de baja el paso a nivel en los registros nacionales, lo que añade otra capa de complicación a la situación actual. Esta decisión de la CNRT podría sumar más escollos a la gestión de la reapertura del tránsito y la posible reactivación del paso a nivel.
En resumen, la paralización de la obra del puente bajo nivel en Junín ha desencadenado una serie de problemas económicos y sociales para la comunidad, afectando a comercios, vecinos y la circulación vehicular en la zona. Mientras tanto, la incertidumbre sobre el futuro de la obra y las decisiones de los organismos reguladores siguen generando preocupación entre los afectados, ya que no hay información oficial ni, mucho menos, certezas.
Entre los hechos y lo meramente declamativo
La inacción por parte de la clase política ha exacerbado aún más la incertidumbre en la comunidad afectada. A pesar de los llamados, reuniones y reclamos de los vecinos y comerciantes para obtener respuestas claras y soluciones concretas, las autoridades locales han ofrecido declaraciones ambiguas que no hacen más que alimentar la confusión y la preocupación.
En los últimos días, representantes del municipio o del oficialismo nacional han utilizado un lenguaje ambiguo, ofreciendo pares duales –y sumamente contradictorios en su contenido- como la posibilidad de que “la obra continúe o se reabra el tránsito”; una falta de respeto a la inteligencia.
Sin embargo, estas declaraciones no han venido acompañadas de información oficial ni de acciones concretas que den esperanzas a los afectados. Esta falta de claridad por parte de las autoridades ha generado frustración entre los ciudadanos, quienes se encuentran en un estado de desconcierto sobre el futuro de la obra y sus repercusiones en la comunidad juninense.
La falta de transparencia y la ausencia de medidas efectivas para abordar esta crisis solo agravan la situación, dejando a la comunidad en un limbo de incertidumbre y desesperanza. En este contexto, se hace cada vez más evidente la necesidad de un liderazgo político que asuma la responsabilidad de resolver esta situación de manera transparente y eficiente, brindando certezas y soluciones tangibles a los afectados.

Propuesta vecinal
En diálogo con Edición Noroeste, vecinos damnificados por la obra reclamaron la reapertura del tránsito y propusieron la utilización de los fondos que recauda el municipio por el cobro de la tasa a los combustibles, de unos 15 millones de pesos mensuales, teniendo en cuenta que la obra para la abrir el tránsito demandaría unos 100 millones de pesos.






Replica a Pablo Petrecca insiste con el pedido de definiciones para resolver la obra inconclusa del paso bajo nivel – Edición Noroeste Cancelar la respuesta