Edición Noroeste

Dos ladrones con los rostros cubiertos, y con armas de fuego, sorprendieron al hombre cuando regresaba a su domicilio. Hay un fuerte operativo de búsqueda de los malvivientes. Se habrían llevado un importante botín, en pesos y dólares. Preocupa la escalada de inseguridad.

El silencio y la quietud de la noche iban a convertirse, raudamente, en una pesadilla. El hombre, de apellido (G) –Edición Noroeste preserva la identidad de la víctima-, cobrador en una conocida empresa juninense del rubro agropecuario, regresaba a su vivienda, anoche, en la zona de Córdoba y Amalia, en el barrio de casas quintas Proyecto Alvear, en Junín, cuando fue sorprendido por dos delincuentes con los rostros cubiertos.

A punta de pistola, al amparo de las sombras de la noche, en un sector de escasas lámparas agotadas –los vecinos vienen reclamando una mejor iluminación desde hace años-, los malvivientes obligaron a la víctima a ingresar a la casa y, una vez en el interior de la finca, maniataron al matrimonio con precintos de seguridad, para poder actuar con total libertad e impunidad y evitar así, perpetrado el robo, que den alerta a la policía.

“Tenían un dato”

Concretamente, los ladrones les exigían a las víctimas la entrega de dinero (un botín de pesos y moneda norteamericana), debido a que, aparentemente, contaban con una “dato”, una modalidad común en el mundo del hampa.  

“Estamos investigando, buscando a los sospechosos”, confió a este medio una alta autoridad de Seguridad de Junín.

Proyecto Alvear es un barrio que cuenta con seguridad privada. Pero, aparentemente, el vigilador privado, ayer, estaba de franco.

“Hay un sector que da a un descampado, que está muy oscuro. Hay que reforzar las luminarias”, reconoció un funcionario local.

Los vecinos señalaron que, años anteriores, registraron otros hechos de inseguridad en el barrio.

Operativo cerrojo

Cuando las víctimas logran desatarse y dar aviso a los agentes del orden, inmediatamente los uniformados montaron un operativo tipo cerrojo, para cercan a los malhechores y tratar de identificarlos. Varios móviles del Comando de Patrullas de Junín iniciaron la búsqueda, con la ayuda del sistema de videovigilancia municipal.

En paralelo, personal de Policía Científica levantó huellas y material probatorio en el lugar del ilícito, adonde se hicieron presentes, a su vez, autoridades y funcionarios policiales, judiciales y de la Municipalidad.

Fuentes policiales informaron, este mediodía, a Edición Noroeste, que se trabaja por estas horas en el análisis de las imágenes del Centro de Observación y Monitoreo (COM) y también de cámaras privadas del sector para tratar de establecer las identidades de los cacos y en qué vehículo se movilizaban.

Hay avances en la investigación, pero este medio se reserva los detalles para no entorpecer la pesquisa que lleva adelante el fiscal, la policía y el personal que trabaja en la causa.

Escalada de delitos

Este hecho de inseguridad enciende todas las alertas en Junín. Es que, según advierten los funcionarios y autoridades de Seguridad- una situación social en franca descomposición, por el agravamiento de la crisis económica, podría devenir en un in crescendo del delito.  

Con todo, este no es un caso aislado. En los últimos días, la ciudad asistió a una serie de robos y asaltos con características similares. En calle Alem, dos cacos ingresaron a una vivienda en momentos en que el propietario estaba descansando, en horas de la madrugada. Y también en calle Rioja, una pareja de adultos mayores fue blanco de un asalto, en el cual fueron maniatados y encerrados en un baño de la vivienda.