Junín se proyecta hacia 2030 con un panorama de avances concretos en infraestructura y servicios, pero también con desafíos estratégicos que requieren planificación, articulación institucional y participación ciudadana. Edición Noroeste dialogó con dirigentes de distintos espacios políticos, quienes coincidieron en que el futuro de la ciudad depende de mantener logros y construir políticas públicas integrales y sostenidas.
Participaron del debate Juan Fiorini (presidente del Concejo Deliberante), José Bruzzone (Unión por la Patria), Maxi Berestein (Frente Renovador), Juan Manuel Sequeira (Junín Bicentenario) y Juan Pablo Itoiz (radical, licenciado en Ciencia Política). Sus declaraciones abarcan empleo, vivienda, infraestructura, planificación estratégica, cogestión, capital social y visión urbana hacia el 2030.
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Infraestructura y servicios: una base sólida según Juan Fiorini
Para Juan Fiorini, Junín atraviesa “un momento muy positivo, con logros concretos que marcaron un antes y un después en su desarrollo, pero también con desafíos que todavía debemos encarar para completar un proceso que empezó hace más de diez años”.
El dirigente explicó que la primera etapa de gestión se enfocó en resolver problemas estructurales que frenaban el crecimiento de la ciudad, como el saneamiento del basural a cielo abierto —el más grande de la provincia—, la repavimentación de la Avenida Circunvalación, la ejecución del desagüe pluvial norte, la recuperación del transporte público y el avance de la autopista en la ruta 7. “Estos son ejemplos de decisiones que ordenaron la ciudad y crearon las bases para crecer”, señaló.

Según Fiorini, con ese piso consolidado, Junín inició una segunda etapa enfocada en generar oportunidades, fortalecer el comercio y la industria, impulsar el turismo y posicionarse como un polo creciente de la economía del conocimiento. «Hoy la ciudad cuenta con gas, agua, cloacas, asfalto, cordón cuneta, alumbrado LED, fibra óptica y loteos, y todo esto se logró sin perder la tranquilidad, la seguridad y la calidad de vida que distinguen a Junín respecto de otras ciudades similares”.
El dirigente subrayó la necesidad de seguir profundizando el crecimiento: consolidar inversiones productivas, potenciar el turismo, parques naturales y la rivera del Salado, ampliar la industria con un nuevo parque industrial, modernizar el Estado y mejorar la experiencia de los vecinos en los trámites. También destacó la prioridad de la educación, el deporte y la formación para el trabajo como motores del desarrollo personal.
“Los obstáculos existen y son reales. La situación económica siempre afecta el ritmo de inversión y condiciona la creación de empleo privado. La modernización del Estado es un proceso que no se resuelve de un día para otro y requiere inversión, capacitación y planificación. Y también enfrentamos el desafío de formar capital humano para acompañar el crecimiento de la economía del conocimiento y de los nuevos sectores productivos. Eso lo estamos haciendo, y vamos a continuarlo”, concluyó Fiorini.

«Hay un desempleo friccional»: la visión de José Bruzzone
José Bruzzone coincidió en que la creación de empleo de calidad sigue siendo un desafío, pero subrayó que el problema central es la falta de conducción estratégica. “Hoy por hoy en Junín creo que hay una especie de desempleo friccional. Hay empresas que necesitan mano de obra y hay gente buscando empleo, pero no encastran ambas tendencias”, explicó.
El concejal destacó la necesidad de una instancia estatal local que articule oferta y demanda laboral y reduzca la fricción entre necesidad de empleo y necesidad de empleados. También señaló la falta de espacios de formación que acompañen la economía real: “El mercado laboral no tiene a la gente que la empresa necesita, y no hay ninguna instancia de formación de esos recursos que reduzca esa fricción en el desempleo”.
Bruzzone recordó que hace más de 26 años ya había presentado proyectos para relevar las necesidades de la economía local y orientar la educación hacia esas demandas, desincentivando carreras saturadas como contadores, abogados. Hoy su propuesta incluye centros de formación profesional y sindicatos.
El concejal también alertó sobre la necesidad de cuentapropistas capacitados, incluso en servicios básicos como comercio y gastronomía, y en áreas más específicas, como el sistema bancario. Su planteo finalizó con un mensaje claro: primero hay que definir un rumbo estratégico y luego orientar la formación educativa. “No hace falta sacar 100 contadores más, 100 abogados más por año, no hacen falta otros 40 profesores de gimnasia; hay que definir la cadena productiva que tiene futuro y formar los recursos que esa cadena va a necesitar”, resumió.

Empleo, vivienda y desarrollo sostenible: la mirada de Maxi Berestein
Maxi Berestein coincidió en que Junín tiene muchas variables positivas que sostienen su crecimiento: ubicación estratégica, conectividad, presencia de la Universidad y administración pública, tradición comercial, entre otras. Sin embargo, advirtió que “todos tenemos la sensación de que estamos lejos de aprovechar nuestro verdadero potencial”.
Para Berestein, empleo y vivienda son ejes centrales para Junín 2030. Propone que cada área municipal actúe como promotor de empleo, convocando, capacitando y acompañando a los sectores productivos. También destacó la importancia de industrias limpias como cultura, deporte, turismo y conocimiento, que incorporan recursos de otros distritos y aumentan el PBI local.
Respecto a la vivienda, alertó sobre un déficit estructural: en el último Procrear se inscribieron más de 1800 familias con ingresos formales, pero la necesidad real es mayor. “Este déficit presiona los alquileres, multiplica las viviendas sobrepobladas y genera problemas sociales graves. Necesitamos una alianza público-privada estable que permita construir viviendas financiadas parcialmente por el municipio y por los beneficiarios, generando una rueda virtuosa”, señaló.
Berestein también propuso alinear la ciudad con los Objetivos de Desarrollo Sostenible, con políticas sobre energía asequible, agua limpia, igualdad de género, educación de calidad, reducción de desigualdades, transparencia, salud y acción climática. “Hay que cambiar improvisación por planificación, Junín tiene con qué. Solo falta decidir hacerlo en conjunto”, concluyó.

Articulación y cogestión: la propuesta de Juan Manuel Sequeira
El dirigente socialista Juan Manuel Sequeira señaló que el gran desafío hacia 2030 es articulación y cogestión. “Observamos que la ciudad posee una base productiva y un capital humano relevante, pero su verdadero despegue depende de resolver cruciales desafíos internos de gestión y coordinación”, afirmó.
Sequeira destacó la necesidad de crear redes sólidas entre universidades, emprendedores y sectores productivos, transformando recursos dispersos en oportunidades colectivas. También propuso un reordenamiento territorial actualizado, mayor inversión en educación ambiental y mejora de conectividad digital para consolidar a Junín como centro logístico regional mediante la Zona de Actividades Logísticas (ZAL).
El dirigente también alertó sobre la planificación turística: “El crecimiento solo podrá darse a través de un producto planificado que logre un equilibrio inteligente entre la Laguna de Gómez y otras alternativas de valor. El objetivo debe ser garantizar que la actividad sea económicamente viable sin comprometer la autenticidad local ni la integridad de nuestro entorno”.

Visión de ciudad y planificación: Juan Pablo Itoiz
Juan Pablo Itoiz subrayó que pensar el Junín del 2030 implica un proyecto compartido y de largo plazo, basado en participación, solidaridad y consenso. Para Itoiz, la ciudad debe aspirar a ser inteligente, verde, resiliente y cultural, con políticas públicas efectivas que aumenten el desarrollo humano y económico.
“Las políticas públicas deben ser el resultado de procesos de planificación basados en recopilación y análisis de información. Su correcta ejecución se traduce en mejores resultados y mayor desarrollo social y económico”, explicó.
Según Itoiz, la planificación y la calidad institucional son clave para que las decisiones políticas respondan a las necesidades reales de la comunidad y aseguren un futuro sostenible para Junín.
Junín 2030: consolidar logros y construir consensos
La síntesis de estas voces revela que Junín ha logrado infraestructura moderna, servicios sólidos y base productiva estable, pero enfrenta vacíos estratégicos en empleo, vivienda, articulación institucional y desarrollo urbano sostenible.
Fiorini apuesta a consolidar inversiones y modernización del Estado; Bruzzone enfatiza la alineación entre educación y demanda laboral; Berestein propone fortalecer sectores productivos y consensuar políticas de vivienda; Sequeira insiste en cogestión y coordinación del conocimiento; Itoiz reclama planificación y políticas públicas eficaces.
Todos coinciden en que el futuro de Junín depende de planificar, coordinar y generar confianza entre Estado, sector privado y ciudadanía. Solo así, la ciudad podrá traducir los avances tangibles en desarrollo integral, sostenible y compartido, acercándose a su potencial y preparando un bicentenario con oportunidades reales para todos.






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