Cristina Fernández de Kirchner cumplirá su condena por corrupción en prisión domiciliaria, en su departamento ubicado en la calle San José 1111, en el barrio porteño de Constitución.
Así lo resolvió este martes el juez federal Jorge Gorini, quien también dispuso que la expresidenta use una tobillera electrónica para monitorear sus movimientos.
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La decisión judicial incluye condiciones estrictas: Cristina deberá permanecer en su domicilio y no podrá salir salvo por motivos de fuerza mayor debidamente justificados. Además, el tribunal advirtió que la exmandataria deberá evitar cualquier conducta que perturbe la tranquilidad del edificio o altere la convivencia vecinal.
El magistrado ordenó que en un plazo de 48 horas se presente una lista con las personas autorizadas a ingresar al domicilio sin necesidad de autorización judicial. Esa nómina incluirá a integrantes del grupo familiar, personal de custodia, profesionales médicos y abogados. Para cualquier otra visita, se deberá hacer un pedido formal y fundado ante la Justicia.
La defensa de Cristina, encabezada por el abogado Alberto Beraldi, había solicitado el arresto domiciliario argumentando la edad de la exvicepresidenta, que tiene 72 años, pero se había opuesto al uso de la tobillera electrónica por la existencia de una custodia permanente. Sin embargo, el juez desestimó ese planteo y dispuso su utilización obligatoria.
Antes del fallo, los fiscales Diego Luciani y Sergio Mola se opusieron a concederle la domiciliaria. Cuestionaron los argumentos de la defensa y remarcaron que Cristina no presentó problemas de salud que impidieran su traslado a una cárcel común. También señalaron que la edad, según la ley, no obliga automáticamente a otorgar ese beneficio.
“La propia expresidenta señaló encontrarse en buen estado de salud”, indicaron los fiscales en base a un informe técnico incorporado a la causa. Además, solicitaron que, en caso de que se concediera el arresto domiciliario, se garantizara el uso de tobillera electrónica, tal como resolvió finalmente el juez Gorini.
Qué dice el fallo
Cristina Kirchner fue condenada a 6 años de prisión e inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos por administración fraudulenta en la causa Vialidad, vinculada a la obra pública durante su gestión. Aunque la sentencia aún no está firme, la Justicia ya comenzó a ejecutar la pena bajo supervisión del Tribunal Oral Federal N.º 2.






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