La suspensión del recorrido tradicional de los colectivos de la empresa TALP que conectaba La Plata con Florentino Ameghino y localidades intermedias del noroeste bonaerense ha transformado el traslado hacia la capital provincial en una verdadera odisea. Pasajeros que deben viajar por motivos de estudio, atención médica o trámites administrativos enfrentan ahora grandes dificultades para acceder a estos servicios esenciales.
A raíz de la reestructuración del servicio, localidades como Lincoln, General Pinto, General Viamonte y Granada se ven obligadas a trasladarse hasta Junín para poder tomar un micro hacia La Plata, lo que implica recorrer entre 50 y 150 km. Con solo dos servicios semanales disponibles, los días viernes y lunes, muchos usuarios se ven imposibilitados de hacer uso regular de la conexión.
Leé también: Luz verde de Nación a la emergencia agropecuaria para Junín y otros 49 distritos bonaerenses
Testimonios que reflejan la problemática
Estudiantes universitarios y personas con necesidades médicas son los más afectados por esta situación. Facundo Santillán, un estudiante de Lincoln en la UNLP, comentó a EL DIA: “La situación genera preocupación. No es solo para los que estudiamos; hay quienes viajan por cuestiones médicas y necesitan estudios de alta complejidad que no se pueden resolver localmente”.
Yamila De Blassi, estudiante oriunda de Pasteur, describe su complicada travesía: “Antes era difícil, pero ahora es imposible. Tuve que tomar un micro en La Plata hacia Capital Federal, luego viajar hasta Lincoln con un extraño y esperar cinco horas para llegar a casa”. Este tipo de experiencias resalta las dificultades que enfrenta la comunidad, que ahora debe lidiar con trayectos largos y conexiones poco prácticas.

Los cambios no solo afectan a los estudiantes, sino también a quienes deben realizar trámites urgentes. Yamila agrega: “Con los cambios actuales, tengo que planificar mis viajes para días específicos, lo que complica mi trabajo y estudios. No puedo dejar a mis mascotas solas tanto tiempo”. La imposibilidad de hacer viajes flexibles crea un gran inconveniente para aquellos que dependen de la conectividad entre localidades.
Aunque la línea de tren entre Retiro y Junín es una opción, muchos usuarios informan que también resulta ineficiente. Lucía Machinandiarena, estudiante de periodismo y oriunda de Lincoln, señala: “El trayecto se vuelve interminable. Desde La Plata tengo que ir hasta Retiro, luego a Junín y esperar horas para conseguir un micro a Lincoln, ya que los pasajes a menudo se agotan”.
Leé también: Venta de pasajes en tren de Junín a Retiro para octubre: descuentos y cómo comprarlos online
Virginia, que trabaja en la ciudad desde Los Toldos, también lamenta la falta de opciones: “Antes había un servicio por semana, pero ahora hay pocos horarios de Junín a Los Toldos. La única alternativa es viajar a Capital Federal, lo que añade más tiempo y costos”.






Deja un comentario