¿Transversales o tránsfugas de la política? ¿Amplios, frentistas, a tono con la nueva política o acomodaticios, tartufos e incoherentes? Son preguntas que exceden los casos individuales y los nombres propios, pero que evidencian, con todo, el signo de los tiempos. El debate está planteado y desde esta tribuna no se busca aplacarlo sino, antes bien, echarle más leña al fuego.
La exsenadora por la Cuarta Sección Electoral Malena Baro asumió en el gobierno de Javier Milei, más precisamente, engrosa la lista de una veintena de nuevos funcionarios que formarán parte de la Vocería que dirige Manuel Adorni.
La dirigente, que se inició en la política de la mano del entonces intendente radical Mario Meoni y fue parte del Frente Renovador de Sergio Massa, integra la nómina de los 19 nombramientos sancionados este viernes –pese al mantra oficial de “no hay plata”-, a través del Boletín Oficial (decreto 504/2024).
Leé también: “Si Petrecca estuviese con La Libertad Avanza, yo no integraría ese espacio”
El nombre, emparentado más con una burocracia soviética que con el eficiente capitalismo que propugna el mileísmo, tiene más de 50 palabras y es grotesco: «Coordinadora De Administración Y Planificación Logística De La Dirección Operativa De Comunicación Digital De La Presidencia De La Nación De La Dirección Nacional De Comunicación Digital De La Presidencia De La Nación De La Subsecretaría De Vocería Y Comunicación De Gobierno De La Secretaría General De La Presidencia De La Nación».
El Poder Ejecutivo sancionó la designación de Baro como Coordinadora (…) a modo de “cobertura transitoria” del cargo por el término de 180 días hábiles -esto es, hasta mediados de febrero de 2025-.
La disposición lleva la firma del presidente Milei y del jefe de Gabinete Guillermo Francos, además de haber sido, presuntamente, recibida con luz verde por Adorni y “El Jefe” Karina Milei.
Radicalismo bonaerense
La contadora pública es vicepresidenta de la Convención del radicalismo de la provincia de Buenos Aires, situación que generará no pocos chispazos internos. De hecho, el propio presidente del radicalismo de Junín, Carlos Mansur, advirtió recientemente a Edición Noroeste que si el intendente Pablo Petrecca “estuviese con Milei”, él no estaría junto al alcalde “amarillo”.
La pregunta que queda resonando es, ¿el pase de Baro al Gobierno es una movida individual o es la avanzada, la exploración de un sector del radicalismo que comienza a pensar que no es tan descabellado sumarse al mileísmo? El tiempo lo dirá.
Edición Noroeste 
Deja un comentario