Edición Noroeste

¿Cuál es su lectura del paro general de la CGT?

-Creo que estos paros tienen motivos fundados, motivos honestos, en su origen, pero terminan siendo movimientos políticos, intentos de desestabilización. En lugar de ser en favor de, terminan siendo en contra del Gobierno. El gobierno anterior se fue con más de 200 puntos de inflación, 50% de pobreza. Bueno, ya sabemos los números desastrosos que dejaron y no tuvo un solo paro en cuatro años de gobierno. La democracia se ejerce en las urnas, no en la calle.

-El Gobierno mantiene altos índices de adhesión, pese a la recesión.

-La imagen positiva no hace más que subir. Creo que este gobierno se sale de los parámetros. Llevamos 20 años de desastre económico y no se soluciona en cinco meses. Javier Melea y el equipo han sabido comunicar esto con efectividad y explicar cuál es el desastre que recibieron. Estamos ante un gobierno transparente, que te muestra cuántos dólares compra, muestra todas las medidas que va tomando por X (Twitter), por todos los medios posibles. Y ya se está viendo la luz al final del túnel.

-¿Confía en que puedan llegar señales de alivio para el trabajador?

-Creo que sí. De hecho, los salarios ya están empezando de a poco a ganarle la inflación. El salario es el último valor de la economía que se actualiza. Cuando se logre frenar la inflación, que es lo que está sucediendo, los salarios van a ir acomodándose. Además, está volviendo el crédito; es una señal. Estamos volviendo a ser un país normal. Un país como los países del mundo en los que la gente vive bien.

-¿Qué va a pasar con los trenes?

-La decisión no está tomada, hasta donde conozco. Probablemente se pase a una cuestión mixta, público-privada. Pero la realidad acá es la ineficiencia general del Estado, que este gobierno viene a destruir. Se terminó la ineficiencia estatal, porque ese es el dinero de los contribuyentes. Obviamente, nadie se pone contento porque alguien se quede sin trabajo. La cuestión es que el Estado ineficiente lo paga el contribuyente. Y ese es dinero que podría circular en la economía, en el sector privado. Mi abuela hace un tiempo atrás me dijo que ‘cuando viajaba de Junín a Buenos Aires llegaba en tres horas’. Este gobierno va a hacer más eficiente cada área del sector público.

-Milei dijo que se cortaba un brazo antes de subir impuestos, pero impulsa volver a cobrar Ganancias.

-Sí, no son medidas que nos gusten a los liberales. Ni a Milei. La cuestión es que hay que hacer lo que sea necesario para sacar adelante todo esto.

-¿Qué va a pasar con la obra del paso bajo nivel?

-Sé lo mismo que vos. Hasta ahora, las consultas que hemos hecho a nuestros superiores nos han dicho que se están analizando todas las posibilidades, es una decisión que simplemente aún no se ha tomado. Si se opta por terminar la obra, ¿cuánto tiempo más va a llevar? Ese es el dato que hay que analizar, creo yo, porque tenemos 60 comerciantes que ya están al límite y algunos ya pasaron el límite. En lo personal, me inclino por la reapertura del tránsito, porque esos comercios necesitan volver a trabajar. Es una obra elefantiásica, que se inició en un Gobierno nacional, que todos sabemos que dejó más de la mitad de la obra sin terminar, y se inició a seis meses de las elecciones. Creo que se están golpeando todas las puertas. Lamentablemente es una decisión que no debería haberse tomado en su momento, no debería haberse iniciado. Pero en la situación en la que nos encontramos es algo que depende del Gobierno nacional, no del gobierno local.