Edición Noroeste

El Juzgado Criminal y Correccional Federal 8 dictaminó la excarcelación del juninense Ariel Pedro Zanchetta, el ex policía acusado de espionaje ilegal a políticos y personas influyentes de la vida pública.

Según consta en el expediente judicial, al que tuvo acceso Edición Noroeste –en exclusiva-, el abogado defensor, el juninense Fernando Scanavino, argumentó que “los primeros informes periciales incorporados en el expediente principal demostrarían que no hubo una actuación conjunta entre su defendido y Nuñes Pinheiro”.

Y agregó que “lo actuado desde diciembre a la fecha corrobora la inexistencia de todo vínculo entre Zanchetta y Nuñes Pinheiro (también procesado en la causa), como así tampoco entre Nuñes Pinheiro y el diputado Rodolfo Tailhade”.

¿De qué se lo acusa?

En el caso se acusa a Zanchetta de ser un agente inorgánico de espionaje que realizó seguimientos, hackeos e informes de inteligencia sobre actividades y vida privada de jueces, funcionarios, políticos, dirigentes sociales, periodistas y artistas.

Según la investigación, el acusado trabajaría a requerimiento de tres presuntos integrantes de la AFI, se presentaba como periodista y publicaba la data recopilada mediante cámaras ocultas, informantes y medios propios, en un medio digital que se enfocaba en información de Junín, vinculado a una agrupación política.

Diez meses detenido

Scanavino confirmó a Edición Noroeste que su defendido recupera la libertad luego de 10 meses de detención, en la causa por asociación ilícita que se inició en el marco de una denuncia del juez federal Borinsky, a quien le fue hackeado su teléfono celular en febrero de 2022.  

Los involucrados en la causa fueron un joven misionero, Ezequiel Nuñes Piñeiro, de 22 años, y Zanchetta, ex policía y “periodista”, oriundo de nuestra ciudad, quien se desempeñó como gerente operativo del diario La Verdad de Junín, que depende del Arzobispado de Mercedes-Luján.

Con las detenciones de ambos, el juez Martinez di Giorgi ordenó una bateria de medidas probatorias, “que a la fecha descartan la asociación ilícita, debido a que las pericias no arrojan vínculo ni comunicación alguna entre las partes”, afirmó Scanavino.

Scanavino: “La asociación ilícita no se probó”

Según el abogado, “la asociación ilícita no se probó, ni se probará, porque jamás existió; solo quedo en una hipótesis del ministerio fiscal”, aseveró.

Ante esta situación, Scanavino solicitó la excarcelación y, hoy, fue concedida por el juez federal.

Al ser consultado por este medio por las causas conexas, en especial la de espionaje político, Scanavino afirmó que “no fue ni siquiera indagado, no se encuentra procesado, y estamos a la espera de pericias, que probablemente sigan la misma suerte de la causa marco, que está quedando trunca”.

“Hemos probado que las averiguaciones realizadas por Zanchetta tenían su correlato con artículos periodísticos, cuyas publicaciones la justicia constató”, dijo.

“Fueron meses muy duros, donde algunos medios de comunicación nacionales hicieron una intencionada deformación de la realidad, atacando el buen nombre y honor de Zanchetta. Una causa que se intentó politizar y perjudicar a los supuestos involucrados, sometiéndolos al escarnio público permanente. Por suerte, y por justicia, las cosas se están aclarando, y exigiremos llegado el momento que se responsabilice a los autores de la difamación de mi defendido”, advirtió.