Por Franco Ruiz

El concejal de Juntos y exsecretario de Obras Públicas de Junín, Marcelo Balestrasse, afirmó en una entrevista con Edición Noroeste que “si hay que reabrir” el paso a nivel de Rivadavia y las vías del tren, “la obra no se hace más”, al tiempo que advirtió que “administrativamente, no existe más”, ya que la CNRT “lo dio de baja” en el sistema nacional de pasos a nivel.

“Si hay que reabrir, la obra no se hace más, porque tapar todo, hormigonar, volver a colocar todo el sistema de accionamiento mecánico de las barreras, más las barreras y lograr que la administración nacional, a través de la CNRT, vuelva a poner como paso a nivel a este lugar, es muy complejo y va a llevar mucho tiempo”, afirmó el edil petrequista, que cuenta con una extensa experiencia en materia de obras y servicios públicos.

Paso bajo nivel de Rivadavia, en Junín.
Una obra paralizada complica a los juninenses.

“Una pena muy grande”

“Si eso se hace, creo que la obra no se hace nunca más, situación que, desde el punto de vista de la planificación urbana, sería un pecado, sería una pena muy grande, ya que se logró el mejor proyecto para poder hacer un viaducto, que si bien está muy acotado, muy apretado en el espacio público, no es un túnel oscuro, sino que es, prácticamente, un viaducto abierto, con aterrazamientos hacia los costados, que hace que sea un espacio mucho más agradable”, aseveró.

“Creo que se debería tener más certeza de qué va a pasar con el Gobierno nacional o buscar formas de financiamiento, ya la empresa propuso dos formas de financiación, una de ellas es que el Gobierno acepte los bonos que tiene la empresa por una obra hidráulica que hizo durante el gobierno de Macri. El Gobierno debería aceptar eso y reiniciar la obra”, dijo.

“La CNRT dio de baja, en el sistema nacional de pasos a nivel, el paso a nivel de Rivadavia y las vías del ferrocarril, o sea que, administrativamente, no existe más».

Marcelo Balestrasse.

“Falta el 80% de la obra”

“Falta el 80 por ciento de la obra, pero en un plazo de obra, si fuese todo normal, demandaría un año y medio, de acuerdo al cronograma establecido por la propia empresa y aprobado por la ADIF”, precisó.

“Una vez que se cierra -ya va a ser la segunda vez que se pierde esta oportunidad- creo que la obra no se hace nunca más. Entiendo la preocupación que tiene el comercio de Rivadavia, lo comprendo, si bien hicimos todo lo necesario para que el desvío del tráfico haga que la gente que va para Barrio Belgrano dé la vuelta por calle Uruguay o por distintas calles, vaya a Alberdi, vuelva a meterse en Maipú y salga por Rivadavia, con lo cual, la gente debería pasar desde el inicio por calle Rivadavia, pero los arquitectos disponemos y la gente, lamentablemente, después hace otra cosa. La gente sigue de largo por Alberdi o dobla en Lavalle y sigue de largo para el lado del Hospital”, reconoció.

Y propuso trabajar en algún esquema de beneficios para aquellos vecinos que compren en los comercios aledaños al paso a nivel. “Todo aquel vecino que compre en esos comercios, que tenga algún beneficio, por ejemplo, en el estacionamiento medido o en el transporte, entradas a la laguna cuando se normalice todo, para entusiasmar a la gente a que compre en esos locales”, sugirió.

“No está habilitado”

“La CNRT dio de baja, en el sistema nacional de pasos a nivel, el paso a nivel de Rivadavia y las vías del ferrocarril, o sea que, administrativamente, no existe más. Por eso, no es abrir -como he escuchado-, ‘ponemos tierra y asfaltamos’, no. No está habilitado en el sistema de pasos a nivel, por lo que hay que hacer una obra enorme, tapar, hormigonar, pavimentar, volver a armar todos los sistemas mecánicos que estaban bajo tierra, que se rompieron, armar la casilla de maniobras, donde estaban todas las palancas, ya que no quedó más nada de eso. Hay que armar la señalización lumínica, sonora y las barreras”, señaló.

“Todo eso tiene un costo enorme, no tanto como la obra del viaducto, pero debe ser de unos 100 millones de pesos -y a lo mejor me quedo corto-, para que después la CNRT vuelva a habilitarlo como paso a nivel. Es muy complejo de resolver. Y lo tiene que resolver Nación, el municipio no puede resolverlo, de ninguna manera”, remarcó.

Gestiones

“El intendente Pablo Petrecca está haciendo muchas gestiones para que esto se resuelva, pero, como todo, lleva su tiempo. Y más en un cambio de gobierno como este, que es totalmente diferente y tiene conceptos muy diferentes respecto de la gestión pública, en relación al kirchnerismo o el macrismo. Esto está rompiendo todos los cánones tradicionales; no lo juzgo, cada uno tiene sus conceptos, pero son los que están y contra eso todavía no están claras muchas cosas como para poder gestionar. El intendente ya hecho varios viajes, se ha reunido con la gente de Transporte y está esperando una señal y un tiempo prudencial para después resolver otro tipo de gestión”, afirmó.

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