Edición Noroeste

Por Franco Ruiz

Federico Melo, secretario general del Sindicato de Empleados de Comercio (SEC) de Junín, afirmó en una entrevista con Edición Noroeste que, en Junín, comienzan a verse señales de preocupación en torno a la pérdida de fuentes laborales como consecuencia de la recesión económica y la consecuente caída en las ventas, aunque aclaró que, por el momento, el impacto “no es masivo”.

-¿Cuál es el panorama en el sector mercantil?

-El panorama no es el mejor, mes a mes las ventas están cayendo, lo podemos ver en los centros comerciales de la ciudad. Y esto repercute en los trabajadores, con la incertidumbre y el temor de que los comercios puedan seguir manteniendo las fuentes laborales. Nuestras paritarias fueron acompañando los niveles de inflación, pero en la última paritaria de febrero estamos reclamando –no solo Comercio, sino también muchos otros gremios- la homologación de los acuerdos. La secretaría de Trabajo de la Nación no está homologando los acuerdos que realizan las federaciones sindicales con las cámaras empresariales. Y ese es un gran problema, porque es un acuerdo entre las partes que no está homologado. Por suerte, se están cumpliendo en la mayoría de las empresas, pero otras esperan esta homologación para hacer efectivo el pago.

-¿Es burocracia o política?

-Creo que es política. Es verdad que en la secretaría de Trabajo apartaron al anterior titular, ahora hay un nuevo nombramiento, se deben estar reacomodando, pero el salario es prioridad, más en estos momentos, donde los precios están aumentando significativamente. Si bien los índices de inflación parece que se están desacelerando, cuando el vecino va a hacer las compras diarias nota que, realmente, los productos están subiendo de precio día a día. Junín es una ciudad muy comercial, por lo que insistimos, con muchas instituciones, en conformar una mesa para ver cómo podemos ayudar. Con la cámara de comercio seguimos con buen diálogo y se han tomado muchas buenas medidas.

-¿Hay algún temor de que esta recesión afecte al sector y se empiecen a ver persianas bajas, locales vacíos?

-Sí, totalmente. Estoy en permanente contacto con compañeros de todo el país. En Junín aún no estamos viendo un golpe masivo en los comercios o en los puestos laborales, pero en todo el país vemos que se han caído puestos de trabajo; las ventas en los supermercados han caído una barbaridad; lo vemos en nuestras farmacias sindicales, donde están bajando las ventas mes a mes. Esto quiere decir que, si bajan las ventas en los supermercados, y en las farmacias, que son productos esenciales, seguramente, en aquellos comercios que no son esenciales, el golpe es más fuerte.

-¿Hay señales de alarma en el empleo?

-Empieza a haber señales de preocupación, hemos detectado algunas desvinculaciones, estamos asesorándolos, dialogando con las empresas. Por ahora, no son señales de gravedad, pero sí de alarma y preocupación.

-¿Cómo analiza el rumbo económico del Gobierno nacional?

-Muy complejo, porque nos están mostrando un número que, cuando vamos a la realidad, no es el que vemos. Nos están hablando de una inflación de un 13%, pero cuando vemos la factura de la luz, tenemos duplicado el importe; cuando vamos al supermercado, lo mismo. Por esta incertidumbre, los gremios estamos discutiendo paritarias mensuales. Ojalá que, realmente, se pueda generar un diálogo entre el Gobierno nacional y las instituciones, los gremios, las cámaras empresariales, porque me parece que eso es lo que está faltando. Diálogo y previsibilidad hacia el futuro. Estamos trabajando todos los días para ver cómo podemos mejorar la calidad de vida de los empleados y empleadas de comercio.

«Está faltando diálogo y previsibilidad en el Gobierno nacional»

-El Complejo tuvo una muy buena temporada de verano, pero ¿cómo se hace para seguir proyectando en un contexto tan adverso?

-Trabajamos día a día en el presente, en la necesidad del afiliado. Sabemos que todas las instituciones, no solo las gremiales, tienen una incertidumbre enorme, pero tratamos de trazarnos proyectos, de seguir fortaleciendo los servicios de salud, recreacionales, educativos. La estructura que tiene nuestro gremio y nuestra mutual es muy importante para el empleado de comercio y para el vecino de la ciudad. Seguimos sosteniendo un centro maternal, al cual asisten más de 120 chicos; seguimos sosteniendo dos consultorios médicos, uno en Barrio Belgrano y otro en el centro; consultorios odontológicos; cinco farmacias, con el problema de la disminución de venta de unidades y los problemas que atraviesan las obras sociales, donde los pagos de los medicamentos a las farmacias cada vez se aletargan más y, cuando antes hablábamos de 30 a 60 días, hoy estamos en 90 días de espera y, tal vez, algunos días más. Estamos haciendo un esfuerzo muy grande, siendo austeros para brindar un servicio como corresponde a nuestros afiliados.